3 ene 2009

El coronel Vallabriga y Sabinosa

No es nada fácil explicar la controvertida relación que tuvo el coronel Vallabriga con la isla de el Hierro y con el pueblo de Sabinosa en particular.
Todo comenzó en la Habana isla de Cuba el 15 de Enero de 1876 cuando nació el pequeño Vallabriga donde su padre militar de profesión había sido destinado, Sin embargo parte de su infancia y adolescencia la paso en la isla de el Hierro donde era originaria su madre. Desde muy joven con apenas 16 años ingresa en la academia militar de ingenieros, pronto destacaría en las diferentes misiones que le habían encomendado ascendiendo gradualmente hasta llegar a ser coronel de ingenieros.

Durante su vida militar viajo en numerosas ocasiones a la isla de El Hierro, donde proyecto y dirigió diferentes obras tanto civiles como militares. Entonces por los habitantes de la isla era bien conocida su labor altruista, al que el coronel Vallabriga siempre considero su patria chica.
Despues de su retiro del servicio activo, previo permiso de las autoridades del momento fabrico una casa en el pozo de la salud para su uso particular. Alli todavía se encuentra en estado ruinoso su casa, con las conchas de lapas incrustadas en las paredes.
Posteriormente en las inmediaciones del pozo de la salud construye mas habitaciones para dar alojamiento a los visitantes que después de un duro camino llegan para recibir los beneficios de sus aguas medicinales. Fueron muchos enfermos que tras graves enfermedades curaron con los beneficios de estas mágicas aguas. Pide también la exlusiva de su explotación y comercializacion. Una vez obtenida la concesión para la explotación de las aguas, Vallabriga organizo la exportación del agua y de la pomada formada por el sedimento que forma al hervirla. Durante los primeros 30 años no paga el canon establecido para su explotación, siendo solo a partir del año 1962 cuando el alcalde de Frontera D.Longinos Morales Perez le requiere para el pago según establecia el convenio suscrito y que no había cumplido.
En los primeros años del siglo XX no existía ningún tipo de infraestructuras publica destinada a almacenar agua en la isla, pese a las innumerables sequias que asolaban a la isla. Los habitantes de Sabinosa para obtener agua potable tenían que caminar el risco hasta la fuente de Mencafete situada cerca de la cumbre y esperar a recogerla destilando de sus paredes. Ya en 1927 y ante las continuas penurias que padecían sus habitantes se realiza una colecta junto al Coronel Vallabriga y se envia desde Tenerife las tuberías necesarias para conducir el agua desde la fuente hasta el mismo pueblo, posteriormente fue construido un deposito para almacenar el agua